¿Los soldados realmente son preparados psicológicamente para situaciones de máximo estrés?

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¿Los soldados realmente son preparados psicológicamente para situaciones de máximo estrés?

febrero 13, 2021 Blog Militar 0
soldado al limite

Durante las maniobras militares, los soldados son adiestrados para la supervivencia, esta preparación se centra sobre todo en preparación física y adquirir determinados conocimientos técnicos sobre la supervivencia pero los soldados casi no reciben adestramiento para prepararse psicológicamente para las situaciones de estrés. Sin embargo un soldado preparado psicológicamente aumenta exponencialmente el éxito de la misión.

Factores psicológicos a considerar para sobrevivir en situaciones limite

El ser humano cuenta con unas limitaciones físicas para sobrevivir, son básicamente estas tres:

  • Somos capaces de sobrevivir hasta 3 semanas sin comer
  • Somos capaces de vivir hasta 3 días sin agua
  • Por norma general somos capaces de sobrevivir 3 minutos sin respirar

A esta regla se le puede añadir la mas básica podemos morir en 3 segundos si no somos capaces de mantener la calma. Dado esta premisa es muy importante entrenar a los soldados a enfrentarse a la ansiedad , el miedo, la culpa, irritabilidad, soledad o depresión. Si los soldados son capaces de controlar sus emociones los resultados de sus misiones serán mas exitosas.

Como preparar a los soldados psicológicamente para afrontar situaciones de supervivencia

soldados guerra
Los soldados se encuentran a menudo en situaciones limite

Las pautas y medidas psicológicas que nos ayudan a afrontar una situación de emergencia son las siguientes:

  • Tener siempre presente la posibilidad de verse envuelto en una situación de emergencia: Cualquier persona no desea verse en una situación peligrosa o de supervivencia, y los militares tampoco, cierto es que les gusta mas el riesgo, pero ninguna persona le agrada el echo de de encontrarse en una situación complicada. Esto no quiere decir que siempre nos pongamos en la peor situación, o que la posibilidad de ponernos en una emergencia domine nuestra vida o desempeño profesional. Pero debemos ser conscientes de la posibilidad de que nos suceda, especialmente en determinados momentos y situaciones, como maniobras, viajar al exterior o desplazamientos por terrenos desconocidos o inhóspitos.
  • Conocerse a uno mismo: Aunque es sorprendente, los seres humanos tienen una capacidad limitada para adaptarse a las condiciones nuevas y cambiantes del entorno. Es importante que todo el personal militar comprenda su adaptabilidad y evalúe sus habilidades de supervivencia, lo que les permita descubrir sus habilidades y desarrollar las habilidades necesarias para la supervivencia. Por otro lado, en nuestra vida, tenemos que enfrentarnos a condiciones que ponen a prueba nuestras resistencias y límites psicológicos: enorme trabajo físico, pérdida de seres queridos, colapso emocional … Debemos analizar objetivamente estas situaciones y ser conscientes de cómo nos sentimos y cómo reaccionamos ante ellos para aprender de la experiencia y mejorar nuestra resistencia psicológica.
  • Una adecuada preparación de supervivencia militar: La preparación y el entrenamiento adecuado para la supervivencia son positivos para todo el personal militar porque pueden fortalecer su cuerpo y mente, mejorar su autoestima y confianza en sí mismos, mejorar su capacidad para improvisar y prepararlos para enfrentar con éxito las condiciones de vida real. El entrenamiento y la preparación marcan la diferencia entre la supervivencia y la muerte. Aunque el instinto humano se ha reducido en comparación con otras especies animales, los seres humanos tienen un arma única: puede aprender racionalmente una serie de comportamientos y habilidades que se pueden ejecutar cuando sea necesario más adelante. Los preparativos para la supervivencia incluyen tres aspectos básicos: técnico, físico y psicológico
  • Adoptar una actitud positiva: La resistencia y la voluntad de sobrevivir pueden ser los factores más importantes para la supervivencia. La historia está llena de muchos ejemplos, que muestran que las exigencias de la mente y la voluntad del cuerpo superan la capacidad. A menudo, la fatiga que experimentan los supervivientes es una señal falsa, no porque su resistencia esté realmente agotada, sino por factores psicológicos, como la desesperación o la frustración, que los llevan al abandono y al fracaso. Por tanto, debemos tener una actitud mental fuerte para poder afrontar la desesperación, el dolor, el aburrimiento, el dolor, el hambre o el cansancio sin fallar. Como se mencionó anteriormente, estos sentimientos y sensaciones tienen un fuerte componente subjetivo.
  • Ser organizado: Cuando llegue el momento, debes mantener la calma y recordar el conocimiento y las habilidades aprendidas en el entrenamiento de supervivencia. Para ello, se recomienda desarrollar un plan de acción, que incluir los siguientes pasos:
    • No precipitarse: En el caso de la supervivencia, es vital conservar la fuerza y ​​la energía, y no desperdiciarla en actividades que no son muy útiles para la supervivencia. En este sentido, el descanso, el sueño y la calma son buenos aliados para los supervivientes.
    • Evaluar la situación de manera realista: Prestar especial atención a aspectos como la presencia de personas lesionadas y peligros o amenazas a nuestra integridad. También debemos considerar la posibilidad de reubicarnos en zonas más adecuadas o favorables para sobrevivir y obtener recursos como agua, comida o fuego. El análisis de esta situación debe ser lo más realista y objetivo posible, porque mantener expectativas poco realistas puede generar frustración durante el primer revés.
    • Establecer metas intermedias: Acércanos al objetivo final de la supervivencia. Establecer estos objetivos y centrarse en alcanzarlos puede estimular nuestra creatividad, inspirarnos y mantenernos vivos. Uno de estos objetivos intermedios es colocar señales o marcas que faciliten el rescate, encontrar o construir refugios para albergar u obtener agua, alimentos u otros recursos que podamos necesitar.
    • Realizar un mapa mental de la zona en la que nos encontremos: Teniendo en cuenta la topografía de la zona y la existencia de puntos característicos en el terreno, como accidentes geográficos (cerros, picos, valles), tipos de vegetación, estructuras o elementos artificiales (excavaciones, caminos, pistas), topografía ( de nivel), La existencia de elementos característicos (árboles colapsados, rocas de formas extrañas), etc. Esto es muy útil si tenemos que salir del camping para explorar el entorno circundante o buscar agua o comida.
  • Tener el control del miedo: La supervivencia depende en gran medida de la capacidad de responder adecuadamente a la presión de la situación. Por lo tanto, todo soldado debe entrenarse para controlar su miedo, percibirlo como algo natural y útil y poder funcionar bajo su influencia.
  • Adaptarse a la nueva situación: La creatividad, la improvisación y la adaptabilidad son aspectos clave de cualquier situación de vida. En este caso se suele caracterizar por un entorno desconocido y hostil, en este entorno la posibilidad de obtener recursos es limitada, y debemos utilizar nuestra imaginación e improvisación para adaptarnos con éxito. Por otro lado, no hay dos situaciones de supervivencia iguales. Tratar de sobrevivir en el desierto es diferente a sobrevivir en los bosques tropicales y no se puede aprender todo con cursos o manuales. Por lo general, aprenderemos algunas habilidades básicas, que se pondrán en práctica en situaciones específicas de supervivencia en el futuro según sus particularidades y características. Es decir, tendremos que modificar los conocimientos adquiridos para adaptarlos a la situación, lo que requiere mucha flexibilidad.
  • Mantente ocupado: Dado que somos personas sociales y estamos acostumbrados a establecer contacto y cooperación con los demás, el aislamiento, la soledad y el aburrimiento reducen nuestras posibilidades y deseos de supervivencia, lo que nos lleva a la desesperación. Para evitarlo, es fundamental centrar nuestra mente en actividades y tareas que aumenten nuestras posibilidades de supervivencia: prestar atención a la higiene personal, recoger alimentos, preparar carteles para ser rescatados o mejorar la habitabilidad de los refugios. Otras actividades para mantenerse ocupado pueden ser desarrollar un plan de actividades para entrenar el cuerpo y la mente (limpieza, mantenerse en forma, practicar la relajación o encontrar comida, etc.), o llevar un diario para anotar datos importantes sobre qué nos sucede…

Conclusiones:

Aprender a sobrevivir es el requisito básico de todo soldado, porque participará en una serie de tareas y acciones que pueden llevar a la supervivencia en su vida: participar en misiones de paz o realizar intervenciones militares, maniobras, ejercicios militares o desastres naturales.

La mayoría de los entrenamientos militares y de supervivencia se centran en la preparación física y la adquisición y desarrollo de una serie de habilidades o destrezas técnicas necesarias para la supervivencia, como construir refugios, obtener alimentos, orientación, etc. La formación apenas tiene en cuenta diversos aspectos psicológicos que son inherentes a cualquier situación de supervivencia, como la ansiedad y el miedo, la soledad o la desesperación. Sin embargo, la experiencia demuestra la importancia de estos aspectos, que suelen limitar al superviviente y dificultar la adaptación, convirtiéndose en un poderoso enemigo de la supervivencia. Por ello, todo el personal militar debe comprender estos aspectos y darse cuenta de su importancia para poder identificarlos, prevenirlos y saber cómo tratarlos. Estas medidas giran en torno a la necesidad de que, dada la naturaleza de las tareas y acciones que pueden ser delegadas, el militar sea consciente de la posibilidad de participar en estas situaciones y comprenda sus propios límites físicos y psicológicos. Este es el requisito principal para un entrenamiento de supervivencia adecuado. El entrenamiento también debe incluir preparaciones físicas, técnicas y psicológicas para que los militares puedan enfrentar las condiciones de supervivencia. Para ello, debe implementar una serie de estrategias y comportamientos, que deben estar impulsados ​​por una actitud positiva y un fuerte deseo de sobrevivir para poder superar la adversidad y adaptarse a la nueva situación.

Por lo tanto, el entrenamiento de supervivencia militar debe prestar especial atención a la influencia de las variables psicológicas y la preparación psicológica de los soldados. La psicología militar puede hacer una gran contribución no solo en la enseñanza , sino también en la preparación para la supervivencia y la vulnerabilidad psicológica en estas situaciones de estrés.

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